Yo soy muy simetrica

1/27/2008



Hombre, yo creo que lo menos que se le puede exigir a un vendedor de zapatos es que si le compras unos de la talla 38 sean de la talla 38 o al menos uno de ellos, o en su defecto, que sean de un tamaño parecido, porque lo q no tiene ningun sentido es que me tenga que poner dos calcetines en el pie derecho y 4 en el izquierdo para que me queden "bien",a pesar de no poder ni andar por tanto calcetin que me impide sentir el roce del suelo, que parece q voy andando como en una nube...


Y lo de los calcetines lo hice hace un par de dias pq llevaba pantalones y no se veia el barullaco que llevaba montado, pero ayer que me puse falda...pues no me iba a poner calcetines debajo de las medias pq no tiene sentido, y porque prefiero partirme un tobillo a que la gente piense que soy una rara.


Lo he estado pensando mucho, me he medido los pies, los he observado asi como de soslayo para que no se sientan intimidados y cabe otra posibilidad...y es que mis padres decidiesen hacerme con un pie más grande que otro pq eso les resultase gracioso en su momento aunque a mi ahora no me esté haciendo reir demasiado...

No sé, pensé que yo era bastante simétrica. Siempre presumí de ello, hasta en las entrevistas de trabajo cuando me preguntaban por tres cualidades mias, yo siempre resaltaba mi sorprendente simetría como una de ellas.


Y no es una idea estupida, es super agradabilisimo encontrarte con alguien muy simetrico! vamos, yo es de las primeras cosas en las que me fijo cuando conozco a alguien, que tenga una simetria par respecto a su origen.

De todas formas la proxima vez me compraré unos zapatos de la talla 37 que es la mia y si no quedan no me compro otra talla y me dejo de inventos que al final me hacen enfadar

1 comentarios:

frenopatico dijo...

No hace falta que leas el blog: escribí en él esto. Luego pensé que me apetecía escribirtelo a tí aquí.

Cuando caminamos por entre la gente, ¿acaso nos fijamos en el número de la talla del pie? Pues nosotros, los de aquí diríamos que es una bobada que no merece mayor condideración. Me dicen que una buena señorita y un buen caballero se fijarán en los zapatos. Y digo yo, que me parece bien el sinmotivo.
Me ha sorprendido lo que me cuenta una amiga. Se queja y con razón. ¿Cómo es posible que le vendan un zapato del 38 y otro de no 38? Pues un lío. Dice ella que así, de esa manera, la obligan a emplear un número indefinido de calcetines para ajustar a medida el zapato...
A la pobre, este suceso, le ha hecho pensar que quizá sus padres, cuando se entretuvieron en hacerla; quizá, como antes decía, le hicieron un pié más grande y otro más pequeño....
¿Mira que si se pone a pensar en esto y dedica mucho tiempo?
Hasta ha llegado a plantearse si es o no simétrica. Claro, y ¡quién no, en estas circunstancias!
Yo os aseguro, que la conozco, que es simétrica: ¡vaya si es simétrica!
Creo que desde me contó lo de los zapatos, en lo primero que me fijaré cuando vaya por la calle es ver si son o no son simétricos los que se crucen conmigo.
Además, me he enterado que esa es, precisamente, una de las partes del cuerpo de las personas que más nos llama la atención. No sabría en estos momentos qué tipo de motivaciones nos invitan a dirigir nuestra mirada a tal lugar, además de la diferencia de 38 de pie.
Pero como nos lo hemos tomado a broma; un grupo de amigos vamos a fijarnos, no en los pies, que ya hemos decidido que con los nuestros tenemos suficiente. Vamos a fijarnos en quienes se fijan. Todo estamos de acuerdo en que nuestra investigación no tiene mucho sentido. Precisamente por eso, porque no tiene sentido, queremos buscárselo; y si no lo encontramos, tendremos ocasión de darle alguno... Como todo en esta vida. Supongo.
El otro día recibí un correo que me enseñaba a averiguar los contactos que me habían dado de baja en su lista. No lo he utilizado. Creo que sería desagradable comprobar que alguien a quien tienes por amigo, e incluso sólo conocido, haya decidido prescindir de ti a través, seguramente, del único vínculo de unión. Por eso yo ni lo abriré.
Todos conocemos a nuestros contactos. No tenemos mas que listar los correos recibidos y los que hemos dejado de recibir. ¿Motivos? Vete tu a saber. A mi se me ocurren algunos. Por ejemplo, que si tenemos otro correo que utilizamos muy, muy esporádicamente. Ese otro correo es un buen refugio para pasar desapercibido ante la ambivalencia de querer y no querer comunicarse con alguien. Además, me he percatado que los correos que te envían son aburridos, impersonales y tontos. Sobretodo tontos. Son tontos los chistes, y también las historietas. A veces se reciben fotografías. Malas fotografías.
Eso no es todo. Hay quien ante la falta de imaginación de que hacen gala, envían los muñequitos que para evitar esfuerzos, ya están pintados en el internet. Estaréis conmigo en que como nos toque en suerte un lerdo así, vamos apañados.
Más cosas. Cuando se felicita a alguien, por ejemplo, por el cumpleaños, porque se casa, porque ha tenido un niño... o porque a alguien se le ocurre decirle a otro alguien que lo que siente es placer, amor, sensaciones, ganas de comérselo, etc, etc. Entonces, también, sin llegar a mover, para no esforzar la imaginación, el internet también lo tiene y lo facilita. ¡Y se envía una postal!¡ Horror de postal.Otra vez los muñequitos!
Con lo bonito que es enviar una postal de verdad, escrita de prisa, sin apoyarse en ningún sitio para poder escribirla. Con los renglones torcidos por eso, y sin dejar espacio siquiera para poner un sello.Una postal de un paisaje, de una catedral, de un camino, de un gato, de un perro.De una iglesia, etc, etc., Pero, ¿y las cosas que se dicen así, de puño y letra?
Definitivamente los investigadores hemos decidido, que no, que tampoco abriremos las postales informáticas.¡ Es que, si nos fijamos... no dicen nada! Bueno a veces sí. A veces dicen felicidades sin ser el día de tu cumpleaños, o enhorabuena, sin estar enterados si has tenido un niño, te ha tocado la lotería, o cenas con un político con el que no quieres cenar.
¡Que cosas suceden con el internet!
¿Qué os parece si trascribo algo de Quevedo que he leído esta tarde?
Seguro que este personaje espectacular de la sorna, se enfadaría mucho si viese la cantidad de sandeces sin gusto y a destiempo que se envían .
Otro día escribiremos más. Ahora no nos apetece. Y además, ¿acaso debemos consideración a los estultos de los que hablamos? ¡Pues eso....no debemos consideración a la ignorancia y a la torpeza, menos!
Cuando veamos una envoltura de celofán bello pero: malo, malo, malo....pensaremos que sólo es eso! Por dentro, casi siempre: un cero.

Contra don Luis de Góngora y su poesía
Este cíclope, no siciliano,
del microcosmo sí, orbe postrero;
esta antípoda faz, cuyo hemisferio
zona divide en término italiano;
este círculo vivo en todo plano;
este que, siendo solamente cero,
le multiplica y parte por entero
todo buen abaquista veneciano;
el minoculo sí, mas ciego vulto;
el resquicio barbado de melenas;
esta cima del vicio y del insulto;
éste, en quien hoy los pedos son sirenas,
éste es el culo, en Góngora y en culto,
que un bujarrón le conociera apenas.
Francisco de Quevedo

Luego, cuando sea ya día escribiré sobre un día que duró años.
¿Cómo es eso? ¡Eso quisiera saber yo! Por eso es por lo que le escribiré a ese día: es lo único que conozco de la historia.

 
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